Uno de los temas que más me ha llamado la atención desde temprana edad ha sido el de la existencia de seres humanoides, siempre me ha parecido una intriga el que algo desconocido posea rasgos humanos. Es por eso que me gustaría compartir con ustedes el encuentro que Jesse y su amiga tuvieron con una criatura humanoide de aspecto increíble.
En la noche del incidente Jesse se encontraba disfrutando de una buena conversación en compañía de una amiga dentro de su auto estacionado a unos metros de su departamento. El complejo de departamentos donde Jesse vivía está situado a las afueras de Saskatchewan, Canadá, rodeado de naturaleza, con un gran campo abierto ubicado al frente del edificio. Mientras platicaban, Jesse dirigió la mirada hacia el campo… y justo detrás de la valla que divide a su edificio del campo abierto, se encontraba una criatura humanoide alta y delgada, con una cabeza grande y unos brazos largos. A parte de esas características, Jesse logro distinguir algo aún más peculiar.
Aquella criatura parecía caminar como si uno de sus lados pesara más que el otro, como si caminara desigual arrastrando un lado al caminar. Jesse llamó la atención de su compañera para verificar que esa criatura no era un figmento de su imaginación, así que, al momento en que las dos chicas confirmaron la presencia de la criatura, salieron del auto y se dirigieron corriendo al interior del edificio sin mirar atrás. Jesse termina su reporte sin brindar más información al respecto.
Este encuentro me interesó mucho por la descripción del humanoide y me puse a investigar un poco más sobre avistamientos similares y me tope con un incidente ocurrido el 25 de mayo de 1955.
Alrededor de las 3:30 de la mañana, Robert Hunnicutt, un hombre de negocios proveniente del pueblo de Loveland, Ohio se encontraba de camino a casa conduciendo su camioneta por la carretera que conectaba el municipio de Branch Hill con Loveland. La noche parecía perfecta, cielo despejado, luna llena y calles desoladas. Para las 4 de la mañana Robert conducía sobre un puente cuando de pronto algo llamó su atención así que detuvo su camioneta a la mitad del puente.
Robert dice haber visto en ese instante tres humanoides de baja estatura, piel plateada, rostro parecido al de una rana y pecho torcido. El hombre continúa su relato de los hechos diciendo que en un principio él se detuvo pensando que eran personas varadas que necesitaban ayuda, pero al fijarse más en las figuras, se dio cuenta de que no eran humanos. Los humanoides caminaban arrastrando un lado al caminar y uno de ellos traía entre sus manos un tipo de cetro en color negro que emanaba destellos de color azul.
Robert salió de la camioneta y en ese instante, una de las criaturas volteo hacia él y comenzó a realizar ademanes con las manos que parecían como si le estuviera ordenando a Robert a quedarse dentro de su camioneta. Según Robert, el avistamiento tuvo una duración aproximada de tres minutos, donde después de eso, en un abrir y cerrar de ojos, se encontraba conduciendo hacia la estación de policía de Loveland a varios kilómetros alejado del puente, sin poder recordar cómo es que había llegado hasta ahí.
En un inicio, supuse que el encuentro de Jesse se podría tratar de un ser extraterrestre, pero cuando encontré la historia de Robert, me di cuenta que existe la posibilidad de que estas criaturas fueran de la misma especie, cambiando mi teoría de seres extraterrestres por la de seres criptozoológicos conocidos como los Hombres Ranas. El nombre les fue acuñado tras el avistamiento de Robert por los habitantes de Loveland y Clermont, Ohio, pero sería hasta 1972 que la leyenda de los hombres rana marcaria al pueblo de Loveland como hogar de estos enigmáticos seres.
En la madrugada del 3 de marzo de 1972, a poco menos de 17 años después del incidente reportado por Robert Hunnicutt, un oficial de policía conducía por Riverside Road dirigiéndose hacia Loveland cuando vio algo que le cambiaría la vida para siempre. El oficial recuenta que conducía despacio debido a la cristalización del asfalto causada por la nieve y las bajas temperaturas, mientras atravesaba el camino, dice haber logrado divisar a unos cuantos metros de distancia frente a él lo que parecía ser un animal varado a un costado de la carretera. De pronto el supuesto animal se lanzó frente a la patrulla, forzando al oficial a frenar de golpe para evitar atropellarla y una vez detenida, la luz de los faros cayó sobre aquella criatura, y es en este instante donde el oficial comenzó a dudar de lo que sus ojos estaban viendo.
En lo que para el oficial parecían horas pero en realidad fueron segundos, la criatura se levantó erguida en dos piernas, dirigió su mirada hacia el oficial, trepó la barandilla y se escurrió por el desnivel de la carretera desapareciendo en el rio Ohio. Según el oficial, la criatura media aproximadamente 90 centímetros de estatura, con un peso entre los 20 y 30 kilos. También afirmó que su piel tenía una textura coriácea y que las características del animal se parecían a las de una rana o lagarto. Tras el reporte del incidente otro oficial investigó la escena más tarde esa noche. Desafortunadamente no vio señales de la criatura, pero informó haber encontrado marcas de rasguños en la barandilla donde supuestamente el animal se había escurrido.
Avistamientos como el de oficial de policía de Loveland han sido reportados con el paso de los años. Muchos investigadores y autores clasifican a los hombres rana como seres extraterrestres, pero en todos los reportes que pude encontrar, los seres siempre suelen ser vistos deambulando entre la naturaleza, sin ningún tipo de tecnología o nave a su alrededor, claro a excepción del humanoide que cargaba un cetro en el avistamiento de Robert, así que creo es más probable que estos seres tengan una conexión con la naturaleza, compartiendo un origen fantástico como las hadas, elfos y demás criaturas del folclor antiguo.